Los potenciales riesgos de la IA: una prioridad en las agendas mundiales

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El presidente de los EEUU, Joe Biden, ha promulgado una Orden Ejecutiva sobre inteligencia artificial segura y confiable (octubre 2023). Una Orden Ejecutiva histórica, según se ha calificado por la propia Casa Blanca, con el propósito de que Estados Unidos lidere el camino aprovechando su compromiso en la gestión de los riesgos de la inteligencia artificial (IA).

La Orden Ejecutiva establece nuevos estándares para la seguridad de la IA, formando ya parte de la estrategia integral de la Administración Biden-Harris para la innovación responsable. La Orden se basa en las acciones que el Presidente impulsó para obtener los compromisos voluntarios de las 15 empresas líderes globales, para facilitar un desarrollo seguro y confiable de la IA, como son OpenAI o Google, que encabezan la lista.

Los grandes apartados a los que se encaminan las acciones concretas que se recogen en la Orden, que según señala la propia Casa Blanca son las más radicales jamás tomadas para proteger a los estadounidenses de los riesgos potenciales de los sistemas de IA, son:

  • Seguridad nacional, economía y salud
  • Privacidad de los estadounidenses
  • Promoción de la equidad y los derechos civiles
  • Defensa de los consumidores, pacientes y estudiantes
  • Apoyo a los trabajadores
  • Promoción de la innovación y la competencia
  • Promoción del liderazgo estadounidense en el extranjero
  • Garantías de un uso responsable y eficaz de la IA por parte de los gobiernos

El Departamento de Seguridad Nacional  (Department of Homeland Security, DHS) desempeñará un papel fundamental para garantizar que el uso de la IA sea seguro en todo el país, según declara el propio departamento en la Nota Informativa publicada a propósito de la iniciativa legislativa de la Administración Biden-Harris.

El DHS gestionará la IA en infraestructuras críticas y el ciberespacio, promoverá la adopción de estándares de seguridad de IA a nivel mundial, reducirá los riesgos de que la IA pueda usarse para crear armas de destrucción masiva, combatirá el robo de propiedad intelectual relacionado con la IA y ayudará a los Estados Unidos atraer y retener talento calificado.

Barak Obama ha declarado en relación a la Orden Ejecutiva que tiene sentido que gran parte de la atención (tanto en el gobierno como en el sector privado) se centre en los riesgos extremos y las amenazas a la seguridad nacional que el avance de la IA representa, prioridad número uno en los temas relevantes incluidos. Sin embargo, pone en valor que la Administración Biden también esté pensando en otros desafíos que podrían terminar siendo mucho más comunes, como son todos los relativos a la protección de derechos individuales.

En palabras del ex presidente “la Orden Ejecutiva de hoy es un paso importante en la dirección correcta”.

Al mismo tiempo que se promulga la Orden de la Administración Biden-Harris sobre los riesgos de la IA, se celebra la primera Cumbre Mundial sobre seguridad de la IA en Reino Unido, con el compromiso por parte de la comunidad internacional, donde destacan  EE.UU., la UE y China, de aunar esfuerzos en la batalla contra los riesgos de la IA, firmando la primera Declaración mundial en este sentido (Declaración de Bletchley).

La idea que subyace en este acuerdo global es que muchos riesgos que surgen de la IA son de naturaleza intrínsecamente internacional y, por lo tanto, la mejor manera de abordarlos es mediante la cooperación internacional.

Es el primer acuerdo mundial que, sin lugar a dudas, será el cimiento necesario para construir juntos una sociedad que avance con los beneficios tecnológicos, pero no a cualquier precio.

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