Vivimos en una verdadera economía de plataformas (aunque es posible que no hayamos caído en la cuenta). Siete de las diez empresas más valiosas del mundo operan actualmente bajo un modelo de negocio basado en las plataformas digitales, entre ellas: Apple, Google, Microsoft, Amazon, Facebook y Alibaba.
Ahora, el sector Legal Tech está, también, adoptando este modelo de negocio, aproximándose a la digitalización a través de ecosistemas de plataformas que proporcionan soluciones integradas, reduciendo los riesgos de ciberseguridad y tratamiento de datos, y ofreciendo precios mucho más accesibles para el mercado como consecuencia de la reducción de los costes de transacción.
Las plataformas online han cambiado de forma fundamental las relaciones económicas y las relaciones sociales. Para entender su verdadero impacto, solo hay que ver las regulaciones que está preparando la Unión Europea para garantizar la transparencia de estas plataformas que deberían entrar en vigor en 2020. Y es que, de acuerdo con un informe reciente de la Unión Europea: “Actualmente, más de un millón de empresas de la UE comercian por medio de las plataformas online para contactar con su clientela, y se estima que alrededor del 60% del consumo privado y el 30% del consumo público de bienes y servicios relacionados con la economía digital total se gestionan a través de intermediarios online».
Era cuestión de tiempo que esta tendencia llegara también a la prestación de servicios jurídicos. El auge de las plataformas está expandiéndose de forma acelerada en el ámbito Legal Tech, con la intención de importar estos modelos de negocio que triunfan en el espacio digital.
¿Cuáles son los referentes en la economía de plataformas?
Estas plataformas difieran tanto en sus objetos como en su estructura. En esencia, existen tres modelos de negocio:
1.- Plataformas transaccionales: esta tipología se refiere, en definitiva, a la estrategia de los marketplaces en los que se une oferta y demanda de forma más eficiente o se construyen lugares de encuentro para distintos grupos de personas. Por ejemplo, Amazon, Ebay, Airbnb o Facebook.
En el ámbito legal: existen tanto en España, como en el extranjero, cada vez más marketplaces jurídicos que pretenden ofrecer un catálogo de abogados a las personas en busca de servicios jurídicos. Estas empresas están pujando por convertirse en el “Uber” de los abogados. De hecho, durante el último año hemos visto como gran parte de las inversiones de fondos de capital riesgo en el sector Legal Tech se realizaban en empresas de esta categoría.
2.- Plataformas de innovación: estas ofrecen marcos tecnológicos que los consumidores y clientes finales pueden adaptar a su uso individual. Por ejemplo, IBM, Microsoft u Oracle.
En el ámbito legal: este modelo tiene un gran potencial para el ámbito del derecho y va a redefinir la forma en la que se prestan los servicios jurídicos. La eficiencia y las economías de escala son los puntos fuertes de estas plataformas. Aquí se enmarcarían los servicios de automatización de procesos, de gestión integral de despachos como LexOn de Lefebvre o las herramientas destinadas al contract management.
3.- Plataformas de integración: estas son una combinación de las dos modalidades anteriores. Por ejemplo, marketplaces de apps como Apple App Store o Google Play. Lefebvre cuenta con Centinela, una plataforma de compliance con software único de gestión que permite la identificación, control y prevención de los riesgos que pueden afectar a una empresa (teniendo en cuenta diferentes materias.
En el ámbito legal: esta categoría ofrece ventajas interesantes como la minimización del riesgo que supone para muchos equipos legales utilizar herramientas desarrolladas por startups con poco recorrido que no pueden acreditar o cumplir requisitos de protección de datos o compliance. De esta manera, es la plataforma de integración, la que garantiza al usuario final los estándares necesarios y se hace cargo de las dificultades de integración. Reynan Court, nacida en Nueva York, es el ejemplo paradigmático de app store en el mundo jurídico que se encuentra en su primera fase de prueba en el mercado estadounidense.
Un factor muy importante a tener en cuenta en la economía de plataformas es que estas actividades online se aprovechan en gran medida de los efectos de red y de la obtención de conclusiones de negocio muy valiosas que extraen de las grandes cantidades de datos que gestionan. Lo que se traduce en un mercado en el que solo unas pocas plataformas dominan el sector en el que operan, siguiendo el modelo “the winner takes it all”. De ahí la gran competencia que se está experimentando para convertirse en líderes del sector Legal Tech.
Por último, la adopción del modelo de plataformas en el sector Legal Tech, no solo impactará en la forma de adquirir y prestar servicios jurídicos, sino que afectará a la naturaleza misma de los trabajos, aumentando la necesidad de nuevas profesiones legales que incorporen sólidos conocimientos tecnológicos, acercándonos a los abogados del futuro.
