Inauguramos la sección del futuro de los abogados de la mano de Lefebvre, todo un referente de la innovación y la transformación digital en el sector legal.
¿Qué mejor forma de hacerlo que examinar un poco más de cerca a los profesionales del derecho que han hecho de la innovación y la transformación jurídica su misión?
Si frecuentas el tiempo suficiente los círculos de la innovación legal, en España, en Estados Unidos, en Reino Unido, en Singapur, en Australia (más o menos en cualquier dirección a la que decidas dirigirte) es posible identificar con facilidad una nueva generación de abogados comprometidos con la innovación.
Pero, ¿quiénes son estos abogados? ¿Quién está detrás de esta nueva generación?
Se trata de profesionales jóvenes, generalmente en la década de los 30.
Profundamente sofisticados, formados y bregados en las batallas del sector legal. Muchos de ellos han trabajado en grandes despachos y grandes asesorías de empresa. Conocen por dentro y por fuera qué es lo que mejor funciona en este mundo. Aún mejor, entienden muy bien que es lo que tiene que cambiar y no se acobardan al mirar al sector cara a cara, con la objetividad necesaria del emprendedor dispuesto a avanzar por terrenos inexplorados. Saben que se trata de remangarse y dar soluciones que funcionen, con los pies en la tierra, y así ser capaces de generar un cambio real.
Internacionales. La mayoría de los que lideran la innovación en España, llevan a sus espaldas años vividos en otros países. Fueron a buscar (fundamentalmente) a Estados Unidos o a otros países europeos, lo que estaba funcionando y se encargan de ver cómo se puede implementar en España.
Este movimiento no es algo nuevo, lo mismo hicieron anteriores generaciones de abogados cuando fueron a buscar inspiración a Reino Unido o Estados Unidos y se trajeron de vuelta el concepto de gran despacho, que ha dado lugar a los despachos que en gran medida hoy lideran el sector.
De la misma forma, estos jóvenes que ahora están trabajando en proyectos embrionarios, en el desarrollo de herramientas tecnológicas, la creación nuevos despachos o la divulgación de ideas rompedoras, serán en pocos años los líderes indiscutibles del sector Legal Tech.
Son atrevidos e inconformistas. El atrevimiento es uno de los ingredientes esenciales cada vez que es necesario nadar a contracorriente o tomar un camino diferente. En definitiva, la creatividad desafiante es su estandarte porque su objetivo es evolucionar.
Convencer a pequeños y medianos despachos de los grandes beneficios que tiene utilizar herramientas de gestión en su día a día, es una tarea que requiere mucha dedicación y pasión. Todos sabemos lo difícil que es cambiar hábitos y rutinas, y aún más, en el ámbito profesional.
Convencer a clientes de que desarrollar contratos siguiendo los principios del legal design puede resultar una herramienta de fidelización muy efectiva, es una tarea heroica. En especial, en un circuito donde la tradición vale su peso en oro.
Convencer a abogados de todo tipo de que la innovación no pone en riesgo la calidad de los servicios jurídicos, ni afecta a la seguridad de los datos de los clientes y que incorporar el uso de softwares en la nube o servicios como las firmas electrónicas no pone en jaque su confidencialidad, es una labor muy exigente.
Saben hablar con profesionales técnicos. Aquí está el gran caballo de batalla. La capacidad de comunicar y construir puentes entre el mundo del derecho y el mundo de la tecnología es indispensable. Tanto para los ingenieros como para los juristas. El desarrollo de herramientas Legal Tech exige la colaboración con ingenieros. El asesoramiento en ámbitos de tecnologías emergentes como, blockchain o herramientas impulsadas por inteligencia artificial, tiene como premisa esencial el entendimiento entre estos dos universos. La generación que está impulsando la innovación lo sabe y se esfuerza en aprender el funcionamiento y la lógica detrás de la tecnología.
¡Muchas son abogadas! Es necesario poner el valor el gran papel que están jugando abogadas españolas en la contribución a la innovación del mundo jurídico. Tenemos ejemplos de abogadas extraordinarias que operan y lideran todos los ámbitos del Legal Tech y la digitalización del sector.
Están dispuestos a asumir las responsabilidades que vienen asociadas con el cambio. No quieren oír hablar de fantasías, de imaginario. Anclan sus esfuerzos en la experiencia comprobada, en el trabajo meticuloso y en la constancia. Saben que la transformación va de la mano de los resultados y están dispuestos a darlo todo por ese objetivo. Porque la innovación no es solo un paso necesario para la modernización del sector legal, la innovación es un ideal por el que vale la pena trabajar cada día.
Por todos estos motivos, si hablas con alguno de los abogados que forman parte de esta nueva generación, verás muy rápido que ante todo, su empuje y determinación, dice que no aceptan un no como respuesta.
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